lunes, 17 de septiembre de 2018

Los violentos de Kelly (1970)

Whola Lawrenian@s!

Hoy traigo al blog la crítica de una película bélica muy gamberra y super divertida: Los violentos de Kelly.


Tras mucho tiempo teniendo la película en bluray cogiendo polvo en la estantería, este fin de semana he conseguido sacar tiempo para poder ver esta cinta y sólo puedo decir que me ha encantado!

Dirigida en 1970 por Brian G. Hutton y con un elenco de actores que a día de hoy reconocemos como GRANDES del cine: Clint Eastwood, Donald Sutherland, Telly Savalas, Don Rickles, Carroll O´Connor, el recién fallecido Harry Dean Stanton, Gavin Macleod, etc...

No me digáis que con sólo ver este fantástico reparto no os entran ganas de poneros ahora mismo la película!

Aunque el actor principal es Clint Eastwood, lo cierto es que durante los 144 minutos que dura la cinta todos los actores consiguen estar en primera línea de cámara sin que nos cansemos de ninguno de ellos, lo que no es nada fácil con tantos actores implicados. Esto es gracias al gran trabajo de Troy Kennedy Martin que escribe un guión sensacional, que a pesar de no contar una historia con demasiado trasfondo, construye unos personajes muy potentes en pantalla y unos actores que defienden el papel con brillantez.

El personaje de Oddball (Donald Sutherland) me ha enamorado desde su primera aparición. Menudo personaje más sinvergüenza! Basta con verle la cara cuando va comandando los tanques que parece un niño en los coches de choque.


Lo mismo me pasa con el General Colt (Carroll O´Connor) que al principio no me llamaba mucho la atención pero llega un momento en la película cuando descubre a este cuadrilla de zumbaos que están en plena contienda, se piensa que son unos valientes con iniciativa cuando realmente son unos cabroncetes que se han ido de parranda a saquear un banco nazi. A partir de aquí me vuelve loco lo muy arriba que se viene el hombre!

Antes de hacer una breve sinopsis de la película, comentar que el director Brian G. Hutton ya había trabajado con Clint Eastwood dos años atrás en otra estupenda película bélica de la Segunda Guerra Mundial: El desafío de las águilas, otra maravilla de película.

La música corre a cargo del famoso compositor Lalo Schifrin y brilla por mérito propio durante toda la cinta, sobre todo con el tema principal: Burning Bridges, que si lo escuchas ahora verás que ya presagia que la película es bastante gamberra.


En Francia (durante la Segunda Guerra Mundial), Kelly (Clint Eastwood) captura a un coronel nazi y mientras inspecciona sus pertenencias descubre un lingote de oro. Claro, a Kelly le empieza a sudar el cogote, con los ojos que le hacen chirivitas y al muy pájaro no se le ocurre otra maldad que emborrachar al nazi para que le cuente dónde hay más de esos lingotes. Así será como descubra que los nazis han transportado 14.000 lingotes a un banco de la ciudad de Clermont (en líneas enemigas).

A partir de aquí consigue liar a sus compañeros de pelotón. Engatusa al que llaman Buscavidas, que es quién se encarga de "conseguir cosas a cambio de otras cosas", en este caso armas y munición a cambio de lingotes. No podía faltar en el equipo el sargento de la unidad, Big Joe (Telly Savalas) y Oddball (Donald Sutherland) un comandante de tanques que está más pa´ya que pa´aca. Oddball, como es muy cuco, escucha la conversación de Kelly con el Buscavidas y le pone ojillos a Kelly y, claro, ¿quién puede negarse ante esa mirada de cordero degolláo?



Organizan toda la misión aprovechando un permiso de descanso de tres días y lo que al principio es una escapada de amigotes el fin de semana se termina liando más que en Resacón en las Vegas....

Por el camino a la ciudad de Clermont irán liando a todo bicho viviente para unirse en esta loca aventura pero no todo será diversión: habrá enfrentamientos con nazis, morirán algunos compañeros... Porque no olvidemos que estamos en mitad de la guerra. Y ese es uno de los grandes aciertos de la película, que combina perfectamente el humor, la acción y el drama sin dejar que decaiga el ritmo en ningún momento.

Desde el cuartel general interceptan una comunicación de esta panda de colgaos en mitad de las líneas enemigas y el General Colt (Carrol O´Connor) interpreta que un grupo de valientes con iniciativa ha decidio avanzar sobre líneas enemigas cansados de esperar órdenes. Colt se viene arriba y no se le ocurre mejor manera de celebrar este espíritu combativo de sus hombres que poniendose el traje de campo y yendo en persona a darles una medalla por su valor.


Finalmente, este grupo llega a la ciudad de Clermont y disfrutaremos de una batalla increible entre los nazis y los hombres de Kelly, con tanques incluidos. Cuando sólo queda en pié un tanque nazi protegiendo la entrada el banco, ¿qué creéis que pasará? Pues lo que menos te esperas: convencen al piloto nazi para que les abra la puerta blindada del banco con ayuda de un petardazo de su tanque y luego se lleve unos lingotes en compensación.


La película acaba con el General Colt llegando a la ciudad, siendo recibido como un héroe por haber liberado la misma (los franceses le confunden con De Gaulle...). Claro, Colt está que no entra en el traje por la emoción y los hombres de Kelly se dan el piro sin que sus superiores se enteren de lo que ha pasado.

En la escena final me ha encantado ese trío de protagonistas (Eastwood, Savalas y Sutherland) al más puro western caminando hacia el tanque nazi para convencer al piloto de que se una a ellos.


Simplemente genial, un clásico del cine bélico y una escuela de cine para muchas películas de hoy en día que pretenden crear un grupo de "locos divertidos" para hacer una misión imposible pero que finalmente se queda en un grupo de personajes vacíos que sólo hacen chistes tontos sin que lleguen a importarnos lo más mínimo. Lo dicho señores de Hollywood: Miren y aprendan!

Espero que os haya gustado mi crítica.

Un abrazo!!!

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